La Alcaldesa de Cancún, Ana Paty Peralta, ha tomado cartas en el asunto y anunció la separación del cargo de los elementos de la Policía Turística vinculados con un incidente ocurrido en el hotel Riu Caribe en Cancún. Esta decisión se da en respuesta a una denuncia presentada por una familia que asegura haber sido víctima de agresiones por parte de los guardias de seguridad del hotel y de la propia Policía Turística.
En un mensaje difundido a través de Facebook, la Edil indicó:
“Ante los lamentables hechos ocurridos donde se ha señalado a elementos de la Policía Turística y a guardias de seguridad privada por presunta agresión a turistas, quiero dejar claro que actuaremos con total transparencia y con todo el peso de la ley”, expresó Peralta.
El incidente tuvo lugar el pasado martes 28 de enero y, según un comunicado emitido por el hotel Riu Caribe, el conflicto comenzó cuando un grupo de turistas ignoró las advertencias del personal sobre la prohibición de ingresar a una piscina de solo 50 cm de profundidad. Según la versión oficial del hotel, los turistas reaccionaron de forma agresiva al ser solicitados a desalojar la zona, lo que llevó a la intervención de la Policía Turística.
Sin embargo, la versión de la familia afectada es completamente diferente. Ese mismo día, publicaron en redes sociales su denuncia, donde afirmaron haber sido objeto de agresiones físicas, robos y amenazas tanto de parte del personal del hotel como de los elementos de la policía. En su relato publicado en Facebook, la familia aseguró haber sido golpeada, sometida y despojada de pertenencias como celulares, relojes y joyas. Además, menciones sobre tocamientos indebidos y amenazas de muerte también fueron parte de su testimonio.
Por su parte, el hotel Riu Caribe ha rechazado las acusaciones, insistiendo en que su personal actuó de acuerdo a las normas del establecimiento. Aseguran que la intervención de la Policía Turística fue requerida a causa de la conducta agresiva de los turistas involucrados.
En respuesta a los acontecimientos, la Secretaría Municipal de Seguridad Ciudadana y Tránsito (SMSCYT) ha informado que se está llevando a cabo una investigación. Según su versión, los turistas exhibieron comportamientos inadecuados, lo que resultó en su traslado ante el juez cívico para determinar su situación legal. Mientras tanto, los elementos de la Policía Turística implicados en el incidente han sido separados de sus cargos por una posible omisión en su actuar.
Este hecho que se viralizó rápidamente en redes sociales, destaca la necesidad de mantener altos estándares de conducta entre los elementos de seguridad y la importancia de investigar de forma rigurosa cualquier alegación de abuso.