En Cambio Diario informó que turistas insensibles ante desplome de un caballo quedaron en evidencia en Palma de Mallorca, cuando un animal de tiro se derrumbó en plena calle bajo el intenso calor. El video del hecho circuló en redes sociales y desató críticas por la falta de reacción de los pasajeros que permanecieron sentados sin ayudar.
Turistas insensibles ante desplome de un caballo
La escena ocurrió en la calle de la Carnisseria, a las 11:30 de la mañana. Un caballo de sulky se desplomó repentinamente mientras llevaba a bordo a cinco turistas. Lejos de mostrar preocupación, los visitantes permanecieron en sus asientos mientras el conductor del carruaje intentaba auxiliar al animal.
El video, grabado por testigos, generó indignación en redes sociales y fue compartido en varios medios locales. Las imágenes muestran al caballo tirado sobre el pavimento, incapaz de levantarse, mientras los turistas seguían inmóviles.
El hecho registrado en video
El registro audiovisual fue difundido ampliamente y expuso la falta de empatía de los turistas. El conductor del carruaje alegó que el caballo había sufrido un resbalón, pero las imágenes muestran señales de agotamiento extremo. El debate sobre la explotación de los caballos de galera volvió a ocupar la agenda pública de Mallorca.
Denuncias de grupos animalistas
El partido animalista Progreso en Verde rechazó la versión del conductor. Según la organización, no se trató de un resbalón, sino de un colapso por fatiga y malas condiciones de trabajo.
El portavoz Guillermo Amengual señaló: “Cada verano ocurre lo mismo. Intentan engañar diciendo que los caballos resbalan, pero en realidad están exhaustos y apenas pueden sostenerse en pie”.
Condiciones de los caballos de galera
Los activistas denunciaron que muchos caballos presentan desnutrición, cojera y falta de herraduras adecuadas. A pesar de estas deficiencias, siguen trabajando largas jornadas bajo altas temperaturas.
{La explotación animal en Mallorca} se ha convertido en un tema recurrente de protesta ciudadana, sobre todo en temporadas de turismo masivo.
Reacción de los turistas
La actitud de los turistas insensibles ante desplome de un caballo fue señalada como muestra de indiferencia frente al sufrimiento animal. Según testigos, ninguno de los cinco pasajeros se levantó para ayudar ni mostró preocupación por el estado del animal.
La organización animalista advirtió que estas escenas se repiten con frecuencia, generando una imagen negativa de la ciudad y de su actividad turística basada en carruajes.
Testimonios y declaraciones de Progreso en Verde
Guillermo Amengual, presidente de Progreso en Verde, aseguró que ha recibido amenazas de conductores de carruajes cuando se registran desplomes. Pese a ello, insiste en visibilizar las condiciones de explotación que sufren los animales.
El dirigente apuntó al Ayuntamiento de Palma por no garantizar controles efectivos y permitir que caballos enfermos sigan trabajando.
Respuesta del Ayuntamiento de Palma
Tras la difusión del video, el Ayuntamiento informó que el caballo recibiría atención veterinaria. Sin embargo, descartó la sustitución de los carruajes por calesas eléctricas debido a los costos. La administración local se limitó a anunciar revisiones periódicas de los animales en servicio.
Casos anteriores de desplomes
El incidente no fue aislado. Apenas dos días antes, otro caballo de galera colapsó frente a la iglesia de Sant Nicolau. Estos episodios refuerzan las críticas de asociaciones animalistas y ciudadanos que piden el fin de los carruajes tirados por caballos en Palma.
El debate que sigue abierto
Los desplomes reiterados de caballos en Palma de Mallorca mantienen encendida la discusión sobre la continuidad de este servicio turístico. La imagen de turistas insensibles ante desplome de un caballo refleja no solo una falta de empatía, sino también la urgencia de replantear un modelo que expone a los animales a sufrimiento constante.