En Cambio Diario informa: Comienza la construcción del gasoducto “Puerta del Sureste”, un proyecto estratégico que fortalecerá la seguridad energética del país y transformará la matriz eléctrica del sureste mexicano.
Un proyecto clave para el sureste
Este mes marcó un hito en la infraestructura energética nacional: comenzó formalmente la operación del gasoducto “Puerta del Sureste”, tras el primer pago realizado por la CFE a la empresa canadiense TC Energy, encargada de su construcción y operación. El pago corresponde al servicio de transporte de gas natural realizado durante mayo, lo que da inicio oficial al funcionamiento de esta obra de gran escala, esto a pesar de probables contratiempos legales que pudieran ocurrir.
El gasoducto “Puerta del Sureste” tiene una longitud de 715 kilómetros y una capacidad de transporte de hasta 1,300 millones de pies cúbicos diarios. Su trazo conecta el puerto de Tuxpan, Veracruz, con centros de entrega clave en Coatzacoalcos y Paraíso, Tabasco, regiones con alta demanda de gas para generación eléctrica.
Comienza la construcción del gasoducto “Puerta del Sureste”
Aunque su operación ya puso en marcha, se han activado trabajos complementarios de expansión para atender la creciente demanda energética en el sur del país. La construcción inicial del proyecto finalizó en menos de tres años y logró una reducción de costos del 13.33 %, pasando de 4,500 a 3,900 millones de dólares.
Se trata del primer gran proyecto desarrollado bajo el esquema de colaboración público-privada entre la CFE y TC Energy, lo cual ha sido destacado como un modelo eficaz de gestión y ejecución. Este tipo de alianza ha demostrado ser clave para acelerar obras de alto impacto nacional sin depender exclusivamente de inversión pública.
El gas natural en la transición energética
El arranque de operaciones del gasoducto ocurre en un contexto de revisión de la política energética del país. El gobierno federal ha apostado por reforzar la infraestructura de gas natural como puente hacia una matriz eléctrica más confiable, mientras se diversifica progresivamente con fuentes limpias.
El objetivo es incorporar al menos 8.5 GW de capacidad instalada mediante nuevas plantas generadoras a gas. Esta estrategia busca garantizar suministro continuo a zonas de alta demanda y estabilizar precios de generación.
La recién creada Comisión Nacional de Energía, organismo que reemplaza algunas funciones anteriores de regulación, trabaja actualmente con TC Energy para validar las tarifas reguladas del gasoducto. Esto permitirá su uso por otros clientes industriales, no solo por la CFE.
Beneficio directo para el sureste
El gasoducto fortalece la capacidad energética de Tabasco y Veracruz, y representa una oportunidad de desarrollo económico y reducción de emisiones frente a combustibles más contaminantes. La inversión, además, generó empleos directos e indirectos en la región y deja infraestructura crítica que atraerá futuras inversiones.
Con este avance, México refuerza su infraestructura energética y consolida un paso más hacia una política de soberanía energética, donde el sureste toma protagonismo como nuevo polo de desarrollo industrial.
Información de Revista Guinda.