La marisquería “Jarocho”, ubicada en la Supermanzana 85 de Cancún, fue atacada a balazos la noche del domingo por sujetos a bordo de una motocicleta. El hecho se relaciona con la negativa de los dueños a pagar el llamado “derecho de piso”, práctica que continúa afectando a comerciantes en la ciudad. En Cambio Diario te trae la información sobre esta balacera en marisquería en Cancún.
¿Cómo fue la balacera en marisquería en Cancún?
De acuerdo con reportes preliminares, los atacantes llegaron al lugar en motocicleta y dispararon en repetidas ocasiones contra la fachada del negocio. Tras la agresión, se dieron a la fuga sin que las autoridades reportaran detenciones.
Los comensales y vecinos que se encontraban en la zona vivieron momentos de pánico por la balacera en marisquería en Cancún, mientras los elementos de seguridad acudieron al sitio para resguardar el área y recabar evidencia.
¿Por qué ocurrió la Balacera en marisquería en Cancún?
Las primeras indagatorias señalan que el ataque estaría vinculado a la extorsión conocida como “derecho de piso”. Comerciantes en diferentes zonas de Cancún han denunciado de forma reiterada este tipo de amenazas, que incluyen agresiones a negocios que se niegan a pagar.
En este caso, la marisquería “Jarocho” habría sido blanco de represalias tras resistirse a entregar dinero a grupos criminales. Este patrón se ha repetido en otros establecimientos de la ciudad, lo que mantiene en riesgo la actividad comercial y la seguridad de clientes y trabajadores.
Impunidad y falta de resultados
A pesar de que en la zona existen rondines policiacos, hasta ahora no se ha informado sobre detenciones relacionadas con este ataque ni con otros casos de extorsión. La falta de resultados en las investigaciones ha generado preocupación entre comerciantes, quienes señalan que la violencia y los cobros de piso siguen avanzando sin control.
De acuerdo con denuncias públicas, muchos negocios en Cancún enfrentan la disyuntiva de operar bajo amenazas o cerrar sus puertas para proteger a empleados y consumidores. Esta situación ha incrementado la percepción de inseguridad en áreas comerciales y turísticas de la ciudad.
Un problema que no cede
La balacera en marisquería en Cancún refleja una problemática persistente: la extorsión como mecanismo de presión contra empresarios locales. Mientras las autoridades no logren detener a los responsables, la violencia seguirá representando un riesgo para la vida cotidiana y la economía de la ciudad.