Por lo pronto la zona que administra Fonatur no se municipaliza: Rogelio Jiménez Pons
Detrás de un permiso de densidad cuando no hay infraestructura urbana que dé soporte, está un acto de corrupción de quien otorgó la anuencia, aseveró el director del Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur), Rogelio Jiménez Pons; esta situación no sólo la vive Cancún, el destino turístico más reconocido que México tiene al momento, también otros en el país. “En el caso de Cancún habíamos perdido hasta los dientes, porque no reconocían su autoridad, ahora es distinto y se debe poner orden, por lo pronto la zona que administra Fonatur no se municipaliza”, aseveró en entrevista exclusiva para Grupo Gremol.
El tema es delicado, los permisos de densidad, y el titular de Fonatur pone un ejemplo reciente; “el 24 de diciembre por la tarde el Cabildo de Tulum aprueba un permiso en el que se autoriza triplicar la densidad. La noticia llega a Fonatur y de inmediato se pone en contacto con el gobernador, luego el presidente municipal da marcha atrás a ese permiso”.
Lo que estaba ocurriendo en Tulum es sintomático en otros, esa autorización de elevar la densidad no beneficia, perjudica porque hace falta una estrategia de servicios urbanos y reordenamiento territorial. “Hicieron banquetas de poco más de un metro de ancho y sin plantar árboles”, exclamó el funcionario, Tulum tiene uno de los mejores turismos del mundo, de los más rentables, “no hay que patear la gallina de los huevos de oro”, dijo: “Es el gran futuro de Quintana Roo y dará mucho que ganar al país”.
En lo que respecta a Cancún, el titular de Fonatur indicó que hay opciones, de entrada no se va a municipalizar, ya se está cerca de firmar un convenio para que se vayan regularizando algunas cuestiones. Y es que esa dependencia federal que impulsó todo el desarrollo turístico de Cancún, había sido rebasada en administraciones anteriores. De tal suerte que, habían perdido su capacidad de gestión y de decisión en la zona, cuando asume el cargo, Jiménez Pons se da cuenta que ahí Fonatur “había perdido hasta los dientes”, generándose anomalías graves, Fonatur gastaba en el mantenimiento de Cancún sin cobrar ningún servicio, pero el pago del predial se va al ayuntamiento. Los hoteleros no reconocían a Fonatur y se consideró la propuesta de dejar de invertir con dinero federal, un monto de 200 millones de pesos anuales, lo que hizo cambiar de parecer al gremio hotelero.
Por otra parte, la buena relación con el gobernador Carlos Joaquín y con la presidente municipal Mara Lezama hacen posible un entendimiento que pronto confluirá con la firma de un convenio en el que se reconoce la capacidad de gestión y autoridad de Fonatur en Cancún, sostuvo.
La problemática de Cancún tiene que ver además con el incremento de servicios y de densidades, indica el funcionario y añade, donde había un lote para 100 cuartos indebidamente y por un acto de corrupción se autorizan 300 sin haber modificado la infraestructura. Lo correcto es haber modificado la infraestructura, pero está ya está al tope.
Por eso estamos en contra de la alta densidad de los hoteles, Fonatur vela siempre por el sano desarrollo. Hay hoteles que por ejemplo con 120 cuartos y que cambiaron la densidad y regresaron con muchos cuartos más, eso está mal, no tienen la norma y esos cambios no le benefician a nadie, porque sobrepasar la capacidad de Cancún va en detrimento de las inversiones, aseguró Por eso están contra los que promueven la sobreedificación ya que beneficia a unos cuantos pero perjudica a la mayoría de los inversionistas.
Otros casos, indicó el entrevistado, no podemos soltarle Ixtapa a la ciudad de Zihuatanejo, porque es muy pequeño en comparación con las 10 mil hectáreas del desarrollo turístico, se desploma la autoridad municipal Se tiene que buscar una forma equilibrada que permita la rectoría del estado sobre el crecimiento, salvaguardando los intereses de la mayoría, precisó.