Lucio Hernández Gutiérrez, secretario estatal de Seguridad Pública, reveló que los propietarios del Mamita’s Beach Club les habían indicado a las autoridades que no necesitaban protección, pues “tenían buena relación con ellos’, en referencia a un grupo delictivo, dejando entrever que su corporación tenía conocimiento de la extorsión que sufría este lugar.
Las declaraciones fueron hechas al periódico español El País, que esta semana publicaron un reportaje titulado “Extorsión y asesinatos en la Riviera Maya: el lado oscuro de la joya turística de México”.
“Nos dijeron que no necesitaban a la autoridad, que tenían buena relación con ellos y que preferían no denunciar porque habían tenido malas experiencias. El crimen derivó de un exceso de confianza. Ellos no tienen palabra y sucede lo que sucede”, apuntó el jefe policiaco.
El “ellos” que no tienen palabra se refiere a la delincuencia organizada, como aclara el periódico español en el siguiente párrafo.
“Ellos son las mafias de crimen organizado que, según los testimonios recogidos para este reportaje bajo condición de anonimato, tienen atenazados a los empresarios de Solidaridad, el municipio al que pertenece Playa del Carmen”, señala el periodista.
El secretario agregó en esta entrevista que, por cada 100 casos, sólo tres o cuatro son denunciados, por lo que se incentiva un sistema de denuncias anónimas y nuevos dispositivos, como la infiltración de policías de paisano en los negocios.
En cuanto a la operatividad del narco en otras zonas de Playa del Carmen, Lucio Hernández indicó que, como medida de seguridad, las autoridades municipales, en diciembre pasado, retiraron a los comerciantes ambulantes de la Quinta Avenida.
“Son el disfraz del narcomenudeo”, sentenció.