El reciente anuncio del incremento del 12% al salario mínimo, que entrará en vigor a partir de enero de 2025, está generando preocupación en el sector restaurantero de Quintana Roo. Julio Villarreal Zapata, presidente de la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (Canirac) en Cancún, advirtió que este ajuste podría obligar a los restauranteros a llevar a cabo una reestructuración en sus gastos, lo que podría derivar en un aumento de los precios de los menús, con el fin de compensar los costos adicionales derivados de este incremento salarial.
Villarreal Zapata destacó que, si bien el aumento al salario mínimo busca mejorar las condiciones laborales de los trabajadores, considera que no es la medida más adecuada para lograr este objetivo. “Esto nos lleva a una situación de reducir costos, bajar gastos, y buscar la manera de implementar medidas para incrementar en lo menos posible los precios, toda vez que la economía no se encuentra boyante”, subrayó el líder empresarial.
Además, señaló que la incertidumbre económica podría verse acrecentada por la posible llegada de Donald Trump a la presidencia de Estados Unidos el próximo 20 de enero. Villarreal Zapata expresó su preocupación por las posibles repercusiones que esto podría tener sobre la economía mexicana, lo que podría afectar al sector restaurantero de Cancún, muy dependiente del turismo internacional.
“Esto podría desacelerar la economía mexicana y crearnos algún tipo de situación económica. Esperemos que no. Sabemos que el gobierno federal, el gobierno de la presidenta Claudia Sheinbaum, está tomando las medidas pertinentes para evitarlo”, concluyó Villarreal.
Este escenario plantea un desafío para los empresarios restauranteros, quienes deberán equilibrar el cumplimiento de las normativas laborales con la estabilidad económica de sus negocios en un contexto de incertidumbre tanto local como internacional.