Eduardo Martínez, presidente del Consejo Coordinador Empresarial del Caribe, señaló que el principal desafío del nuevo Fideicomiso será obtener los recursos necesarios no solo para mantener el bulevar Kukulkán con un costo anual de 200 millones de pesos, sino también para realizar mejoras en plantas de tratamiento, reencarpetado y otras obras, que podrían superar los dos mil millones de pesos en inversión.
Durante su reunión mensual con la Profeco para revisar operativos de verificación, Martínez destacó la importancia estratégica del Fideicomiso, que asumirá responsabilidades antes gestionadas por Fonatur, crucial para preservar la imagen turística y el mantenimiento del corredor.
Martínez enfatizó la necesidad de administrar el fideicomiso con transparencia y eficiencia para optimizar y mejorar continuamente las instalaciones turísticas, subrayando las múltiples áreas de oportunidad que deben ser atendidas con meticulosidad.
Respecto a la financiación del fideicomiso, Martínez subrayó que aún se están evaluando las fuentes de financiamiento, incluyendo aportaciones del sector privado, municipal, estatal y federal, destacando la importancia de garantizar un flujo constante de recursos etiquetados para el mantenimiento continuo.
El líder empresarial mencionó la necesidad urgente de asegurar una bolsa anual de 200 millones de pesos para el mantenimiento básico, pero enfatizó que se requerirán al menos dos mil millones de pesos adicionales para proyectos de mejora y nuevas inversiones, que podrían implementarse de manera gradual según un plan estratégico detallado.
Martínez concluyó destacando que, aunque se han logrado avances como el suministro eléctrico garantizado por la CFE y el potencial de crecimiento hotelero, las infraestructuras como el drenaje y las plantas de tratamiento están superadas, requiriendo inversiones significativas para mantener y mejorar la competitividad de Cancún como destino turístico de clase mundial.
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