En el fraccionamiento Urbi Villas del Rey, en Cancún, las irregularidades de una desarrolladora han provocado un grave problema de contaminación. Víctor Hugo Guizasola, presidente del Comité de Vecinos Propietarios, denunció el rebosamiento de aguas residuales, una situación que lleva mucho tiempo sin resolverse.
Según Guizasola, las aguas negras son desaguadas al aire libre y luego bombeadas hacia los mantos freáticos de la ciudad, en una clara violación de las normativas ambientales.
El presidente del comité señaló que la desarrolladora construyó una planta de tratamiento para 400 viviendas, a pesar de que en realidad hay más de cinco mil viviendas en todo el residencial. Esta discrepancia ha llevado al colapso del sistema de tratamiento, generando una crisis ambiental.
Estos problemas existen desde 2012, cuando Guizasola compró su casa, y a pesar de sus esfuerzos por denunciar la situación a las autoridades, las respuestas han sido insuficientes.
Multa sin consecuencias
La Procuraduría de Protección al Ambiente (PPA) multó a la desarrolladora con dos millones 200 mil pesos, pero no se tomaron medidas adicionales para resolver el problema.
Ante esta situación, Guizasola ha solicitado un amparo al Juzgado Quinto de Distrito, exigiendo que las autoridades municipales respondan por los derrames de aguas residuales. La falta de supervisión y vigilancia por parte del Ayuntamiento de Benito Juárez ha permitido estas irregularidades.
Activistas, como Antonella Vázquez de la organización Defendiendo el Derecho a un Medio Ambiente Sano (DMAS), han respaldado la demanda de amparo. Vázquez destacó que estas irregularidades no son únicas de Urbi Villas del Rey, sino que afectan a numerosas unidades habitacionales en Cancún.
El Juzgado Quinto de Distrito resolverá el amparo mañana, y los vecinos afectados esperan un fallo a favor que garantice su derecho a una vivienda digna y un medio ambiente saludable.
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