El fiscal general de Quintana Roo, Raciel López Salazar, anunció que no se encontraron rastros de fentanilo en los exámenes toxicológicos realizados a las dos jóvenes estadounidenses que denunciaron una supuesta intoxicación con esta sustancia durante su estancia en un hotel de Cancún.
Las turistas, identificadas como Kaylie Pitzer y Zara Don Hull, afirmaron que fueron drogadas mientras disfrutaban de bebidas en la zona de albercas del resort, en compañía de dos hombres.
El incidente ocurrió el pasado 2 de agosto, cuando ambas jóvenes presentaron síntomas severos, incluyendo convulsiones, que las llevaron a ser trasladadas a un hospital cercano. Una de ellas tuvo que ser intubada y, debido a la gravedad de su estado, fue enviada a un hospital en Dallas, Texas, con la ayuda de la Embajada de los Estados Unidos en México. Sin embargo, tras realizarse los exámenes pertinentes, la Fiscalía confirmó que no se encontraron rastros de fentanilo en su sistema.
Además, el fiscal López Salazar afirmó que no hay evidencia de narcomenudeo de fentanilo en Cancún, un tema de creciente preocupación a nivel internacional debido a la alta mortalidad asociada con esta sustancia en Estados Unidos. La investigación, que comenzó tras las denuncias realizadas por las jóvenes a través de redes sociales, continúa sin que se haya presentado una denuncia formal por parte de las víctimas o sus familiares.
En tanto, Bernardo Cueto, titular de la Secretaría de Turismo Estatal (Sedetur), expresó su preocupación por el impacto negativo que este incidente podría tener en la imagen turística de Cancún. Cueto destacó que, a pesar de la gravedad de las acusaciones, la falta de cooperación de los familiares y la ausencia de una denuncia formal dificultan la investigación. También criticó la difusión de información incompleta por parte de algunos medios de comunicación, lo que, según él, podría dañar injustamente la reputación del destino.
La Sedetur y la Fiscalía continúan trabajando en conjunto para esclarecer los hechos y asegurar que cualquier acción ilegal sea debidamente sancionada. Mientras tanto, las jóvenes han regresado a su país, y sus familiares han anunciado que tomarán medidas legales por los costos médicos y el supuesto acto de extorsión que denunciaron en el hospital mexicano.
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