Juan Pablo Guillermo Molina, exsecretario de Finanzas del sexenio de Roberto Borge, se amparó de nuevo y evitó comparecer el pasado martes 10 de agosto, por las acusaciones que enfrenta por la Fiscalía Anticorrupción, por el desvío de tres mil 177 mdp.
Oculto desde hace 32 meses para evitar su aprehensión por las acusaciones que enfrenta de la Fiscalía Especializada en Combate a la Corrupción del Estado de Quintana Roo, el ex secretario de Finanzas y Planeación de la pasada administración lleva en su cuenta 31 juicios de amparo.
Desde 2017, el principal operador de millonarios desvíos de recursos públicos durante la gestión del gobernador Roberto Borge Angulo —actualmente preso—, ha conseguido una decena de resoluciones que le son favorables en juzgados federales tanto de Quintana Roo como de Yucatán.
Sobre el ex funcionario estatal pesan al menos siete cargos penales que han sido denunciados por la Secretaría de la Contraloría estatal, que lo señalan como presunto responsable del desvío de tres mil 177 millones de pesos.