Dos jóvenes estadounidenses, Kaylie Pitzer y Zara Don Hull, han denunciado haber sido drogadas durante sus vacaciones en un hotel de Cancún.
Ambas, de poco más de 20 años y estudiantes universitarias de Oklahoma, viajaron a México acompañadas de sus novios y otra pareja.
El incidente ocurrió al día siguiente de su llegada, tras consumir bebidas en el bar de la alberca del hotel.
Kaylie y Zara recuerdan haber pedido agua en el bar de la alberca antes de desplomarse súbitamente.
“El último recuerdo que tengo es caminar en la piscina. Mi agua tenía burbujas, estábamos en el bar de la alberca y ambas estábamos noqueadas”, mencionó Kaylie.
Ambas fueron llevadas a sus habitaciones en sillas de ruedas, ya que estaban inconscientes y no podían moverse ni hablar.
A la mañana siguiente, Kaylie despertó con náuseas y dificultades para moverse. Zara, por su parte, fue trasladada de urgencia al hospital debido a convulsiones.
Las turistas dejaron el hotel de Cancún para regresar a su país
Ante la falta de mejoría, la Embajada de Estados Unidos recomendó trasladar a Zara a su país para recibir una atención más adecuada.
Zara fue enviada en un avión médico a un hospital en Dallas.
“Su cuerpo está sobrecargado, su hígado y todo. Le llevará un tiempo desintoxicarse de esto”, explicó Stephanie Snider, la madre del novio de Zara.
La evaluación médica de Zara en Estados Unidos ascendió a 60 mil dólares, mientras que el vuelo médico costó 28 mil dólares.
Los médicos en Estados Unidos creen que las bebidas de las jóvenes podrían haber sido adulteradas con fentanilo sintético, una droga potente y peligrosa.
Las familias de Kaylie y Zara han expresado su frustración por la falta de un informe toxicológico por parte de las autoridades mexicanas.
Además, esperan que se realice una investigación exhaustiva para prevenir futuros incidentes similares y asegurar la justicia para Kaylie y Zara.