En Cambio Diario informa: Denuncian a la UT de Chetumal por hostigamiento laboral, al evidenciarse un conflicto prolongado entre autoridades y personal académico, especialmente los docentes por asignatura que representan la mayoría de la plantilla.
Denuncian a la UT de Chetumal por hostigamiento laboral sistemático
En una nueva ola de inconformidades, profesores por asignatura de la Universidad Tecnológica de Chetumal alzaron la voz contra lo que califican como prácticas de hostigamiento laboral y violaciones a sus derechos. Más del 90% de la carga académica recae sobre este grupo, pero su condición contractual se renueva cada cuatrimestre, eliminando toda posibilidad de antigüedad y generando incertidumbre constante.
Además de contratos intermitentes, los denunciantes aseguran ser blanco de vigilancia constante por parte de áreas internas como Pedagogía, Sociocultural y Tutorías, así como por parte de personal con presuntos criterios arbitrarios, lo que ha derivado en un entorno de presión y desgaste.
Nómina inflada y favoritismo institucional
Una de las principales quejas se centra en la política institucional que permite que ciertos profesores de tiempo completo acumulen horas en otras instituciones educativas o dependencias gubernamentales. Esto, según los denunciantes, constituye una violación directa a la Ley de Responsabilidades Administrativas de los Servidores Públicos.
Algunos casos señalados incluyen a:
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Francisco Rivas Aguayo (CETMAR)
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Eder Delgado (CBTIS 253)
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Julio Te Azarcoya (Instituto Tecnológico de Chetumal)
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Fernando Trejo (IMOVEQROO y CONALEP)
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Karla Tec Escalante (Ayuntamiento de Othón P. Blanco)
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Rafael Dircio López (Universidad Modelo)
Todos ellos han sido señalados por ausentismo, llegadas tardías o falta de compromiso, sin repercusión alguna por parte de las autoridades universitarias.
Irregularidades en pagos y asignaciones laborales
Se reportan casos de personas en la nómina que, pese a tener cargas horarias significativas, no imparten clase alguna. Tal es el caso de Dulce Carolina Smith Villanueva, Erick Leonardo Dzib, María Cruz Ac y Roberto Pérez López.
También se critica el gasto en servicios duplicados, como el área de Psicología, que cuenta con tres psicólogos a tiempo parcial en una universidad con matrícula reducida, y un departamento de Nutrición más enfocado en eventos internos que en tareas técnicas sustantivas.
Despidos injustificados y demandas acumuladas
A esto se suma la actuación de la directora administrativa, Julia Mariluz Martínez Sánchez, acusada de ejecutar despidos sin previo aviso ni liquidación. Las demandas laborales se acumulan, agravando el conflicto laboral que afecta la reputación y estabilidad de la UT de Chetumal.
El rector Alfredo Marín Marín y la directora académica Eréndira Blanco Santana han sido señalados por su falta de respuesta y liderazgo ante esta crisis, ignorando sistemáticamente las quejas del personal docente.
Exigen auditoría y justicia laboral
Ante estas irregularidades, el personal académico exige una auditoría interna y externa, así como la intervención de autoridades estatales y federales. Solicitan también que se respete la ley, se depure la nómina y se revalorice el trabajo docente.
“El verdadero motor de la educación no puede seguir marginado por una élite burocrática. Queremos una universidad transparente y justa”, concluyó uno de los voceros del movimiento.