El debate entre los candidatos a la gubernatura organizado por el Instituto Electoral de Quintana Roo terminó siendo desaprovechado, en parte por los ataques mutuos que sustituyeron a las propuestas, pero más por las preguntas “a modo” de la autoridad electoral, alejados de cualquier posible cuestionamiento hacia el Gobierno del Estado, consideró Eduardo Galaviz Ibarra.
Para el presidente del Observatorio Legislativo, los temas abordados por el Ieqroo, corrupción; sociedad y gobierno; y economía, parecían haber sido consultados previamente con el Poder Ejecutivo, para evitar tocar temas en donde pudieran salpicar críticas hacia la actual administración.
El también empresario consideró inexplicable cómo en las preguntas, que se supone provienen de las propuestas de los ciudadanos, no incluían el rubro de seguridad, cuando se trata de la principal preocupación para muchísimos quintanarroenses.
También fue omitido el desafío de la pobreza, pese a que datos del Coneval (de 2020) muestran que un 47.5% de la población del estado está en esa condición, y un 10.6% en pobreza extrema.
Tampoco el Ieqroo incluyó alguna pregunta sobre las finanzas públicas, pese a que la deuda actual es una carga “contra la que se estrellan muchas de las políticas públicas en Quintana Roo”.
Este aparente temor, de abordar temas que puedan resultarles espinosos al Ejecutivo, hizo que se desperdiciara un foro que además tuvo alta audiencia.
En su opinión, el debate pareciera estar armado “a modo” pero para encubrir al Gobierno del Estado, no en favor de algún candidato.
Cortesía: AGENCIA SIM