Tras el reinicio de clases después del período vacacional de Semana Santa, padres de familia manifestaron su preocupación por la falta de condiciones sanitarias e de higiene que prevalecen en algunos planteles que no han sido atendidos tras ser vandalizados.
Una madre de familia de la escuela primaria Aquiles Serdán, que pidió omitir su nombre para que no haya represalias pero que se identificó de manera plena dijo que ha tenido que dotar a su hijo de toallas sanitarias y de agua en un garrafón para que pueda lavarse las manos ya que no hay agua en los baños.
Recordó, incluso, que antes de salir de vacaciones los maestros tuvieron que suspender clases dos días por la falta de agua y de energía eléctrica.
Dijo que las autoridades educativas se comprometieron a reponer el cableado eléctrico, la bomba de agua y las mangueras antes de volver a clases, lo cual no fue cumplido.
Incluso dijo que los maestros anticiparon la posibilidad de suspender nuevamente clases por la falta de energía y de agua potable ya que los niños no pueden ni siquiera utilizar los sanitarios.
Ante esa situación decidió agregar toallas húmedas y un garrafoón con agua en la mochila de su hijo para que pudiera lavarse las manos.