La madrugada del 16 de noviembre, balean a agente del FGE de Quintana Roo en el estacionamiento de la Plaza de Toros de Cancún, horas después del aseguramiento de un arsenal histórico ligado al CJNG. La víctima, identificada como Altamirano Olarte, pertenecía a la Unidad de Narcomenudeo y participaba en investigaciones relacionadas con células delictivas en la Zona Norte.
Asesinato ligado a represalia criminal
Altamirano Olarte salía de un bar en la Plaza de Toros cuando fue interceptado por varios agresores que le dispararon a corta distancia. El ataque ocurrió junto a su vehículo, un Jetta blanco con las puertas delanteras abiertas. Testimonios señalan que estaba acompañado de una mujer que no fue localizada, lo que abrió nuevas líneas de investigación.
La ejecución se produjo menos de 24 horas después del operativo donde autoridades detuvieron a Marcos Josué “N”, operador logístico del CJNG. Este contexto refuerza la hipótesis de que balean a agente del FGE de Quintana Roo como respuesta directa del cártel tras perder armamento, vehículos, drones y equipo táctico.
Operativo detonante: captura clave del CJNG
Aseguramiento de arsenal histórico
El operativo conjunto entre la Secretaría de Seguridad Ciudadana y la Marina dejó como resultado la captura de dos presuntos integrantes del CJNG y la incautación de 44 armas de fuego, granadas antimotín, silenciadores, chalecos antibalas, drones, libretas con información logística y droga. Autoridades calificaron el decomiso como uno de los más relevantes en la historia reciente del estado.
Cancún en escalada violenta
El crimen ocurre dentro de una semana marcada por hechos armados que han dejado víctimas civiles, incluidos un bebé, una mujer embarazada, adultos mayores y comerciantes. Para especialistas, el asesinato confirma que balean a agente del FGE de Quintana Roo como parte de una ofensiva del CJNG para sostener control territorial en Cancún y municipios aledaños.
La extorsión, el cobro de piso y los ataques directos a elementos de seguridad muestran una dinámica criminal en expansión. Pese a las estrategias federales y estatales, Cancún enfrenta un escenario crítico donde los operativos generan acciones reactivas de grupos armados que elevan el riesgo para agentes y población civil.
Impunidad y mensaje criminal
La Fiscalía abrió una carpeta por homicidio calificado y aseguró que se desplegaron acciones conjuntas para localizar a los responsables. Sin embargo, especialistas advierten que la ejecución de Altamirano Olarte es un mensaje de alta violencia que evidencia que balean a agente del FGE de Quintana Roo como demostración de fuerza del crimen organizado.
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