En su primer discurso tras tomar ventaja sobre la demócrata Kamala Harris, el republicano Donald Trump se comprometió a “sellar las fronteras” de Estados Unidos y permitir solo la entrada de inmigrantes “de manera legal”. Aunque las proyecciones le otorgan 277 votos electorales frente a los 244 de Harris, su victoria aún no se ha confirmado oficialmente.
En un mensaje desde el centro de convenciones de Palm Beach, rodeado de familiares y seguidores, Trump evitó mencionar la “deportación masiva” que había prometido en campaña. En cambio, afirmó: “Vamos a sellar nuestras fronteras. Queremos que la gente regrese, pero lo van a tener que hacer de manera legal”.
Trump también enfatizó la necesidad de “sanar” el país y resolver los problemas en la frontera, señalando que Estados Unidos “necesita ayuda, y la necesita urgentemente”.
Durante su campaña, Trump mantuvo un discurso antiinmigrante, acusando a los migrantes de aumentar la criminalidad y quitar empleos a los estadounidenses. Incluso, llegó a prometer que utilizaría la ley marcial para detener a personas indocumentadas.
Por otro lado, la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo, en su conferencia matutina, destacó una reducción del 75% en el flujo de migrantes hacia la frontera estadounidense. Esta declaración surgió en respuesta a la amenaza de Trump de imponer un arancel del 25% a las exportaciones mexicanas si México no frena la migración y el crimen organizado en la región.
El lunes, en un mitin de cierre de campaña, Trump amenazó a Sheinbaum con estos aranceles, exigiendo acciones concretas para detener lo que describió como una “avalancha de criminales y drogas” hacia Estados Unidos.
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