La presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, expresó su desacuerdo con la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) tras su decisión de analizar la reforma del Poder Judicial, promulgada el pasado 15 de septiembre.
Durante la conferencia matutina en Palacio Nacional, Sheinbaum afirmó que la decisión de la Corte “no tiene sustento” y que parece una provocación contra el Gobierno de la Cuarta Transformación.
Sheinbaum insistió en que no caerán en provocaciones y aclaró que el Gobierno es democrático, recordando que tanto ella como los legisladores fueron elegidos por el pueblo. Asimismo, subrayó que la Constitución, en su artículo 39, establece que jueces, magistrados y ministros de la Corte deben ser elegidos por el pueblo.
La mandataria criticó a un grupo de ministros, señalando que defienden sus privilegios y buscan detener la transformación del país. Agregó que la Corte no tiene facultades para modificar la Constitución ni declarar inconstitucional lo que ya fue aprobado constitucionalmente por el Congreso y los estados.
La polémica surge después de que la SCJN admitiera una impugnación para revisar si la reforma judicial, impulsada por el expresidente Andrés Manuel López Obrador, es compatible con los principios de independencia judicial y división de poderes. La Corte decidió abrir una controversia para analizar la reforma, lo que ha generado críticas de organismos internacionales por el riesgo que representa para el Estado de derecho en México.
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