Algunos elementos del Tri lucieron un rostro serio y desencajado durante la sesión de este domingo, con miras al duelo clave que sostendrán frente a Arabia Saudita
Luego del duro descalabro ante Argentina, la Selección Mexicana volvió a entrenar con la mente fija en el duelo ante Arabia Saudita del Mundial. Ante los ojos vigilantes de Yon de Luisa, presidente de la Federación Mexicana de Futbol, el equipo empezó a preparar lo que será un decisivo y determinante partido ante los árabes para mantenerse con vida en Qatar.
El mandamás del futbol mexicano se tomó el tiempo para saludar al cuerpo técnico, con un enfático apretón de manos Jorge Theiler y Norberto Scoponi le dieron la bienvenida, el ‘Tata’ Martino tardó en salir de los vestidores, de igual manera el cuadro titular, algo poco habitual en los entrenamientos mundialistas, el Tata se tomó su tiempo durante la charla previa en los vestidores.
Los sparrings comenzaron a entrenar varios minutos antes al costado de la cancha del deportivo Al Khor SC, casa del Tri en Qatar.
Una vez en el campo, los jugadores realizaron movimientos regenerativos, varios de ellos con el rostro desencajado y o prácticamente en silencio, lejos quedaron las risas y bromas que se vivieron en los primeros días de la justa mundialista.
El cansancio que manifestaron algunos futbolistas al finalizar el partido ante la Albiceleste, sumado el duro golpe anímico se reflejó en el entrenamiento, Andrés Guardado trabajó por separado luego de que presentara molestias musculares, mientras que Hirving Lozano habló largo y tendido con el técnico nacional.
El ‘Chucky’ y el ‘Tata’ conversaron por unos minutos a sabiendas de que ante Arabia Saudita no puede aparecer el fantasma de la falta de contundencia. El grupo se dividió en dos, entre titulares y suplentes y los trabajos fueron diferenciados, por lo menos al arranque de la práctica, a la que la prensa tuvo acceso por alrededor de 20 minutos.