En una reciente conferencia de prensa, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, hizo una declaración en la que aseguró que Omar García Harfuch, exsecretario de Seguridad y exintegrante de la División Gendarmería de la Policía Federal, no participó en la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa. Esta afirmación se basa en la información que ha surgido en el curso de la investigación sobre este trágico incidente.
El mandatario explicó que durante la investigación se ha descubierto que hubo una o dos reuniones de funcionarios públicos estatales y federales en el momento en que ocurrieron los hechos relacionados con la desaparición de los normalistas. Sin embargo, estas reuniones fueron de carácter público, y se cuenta con grabaciones de las mismas. En una o dos de estas reuniones, estuvo presente Omar García Harfuch, quien en ese momento se desempeñaba como jefe de seguridad pública.
El presidente López Obrador destacó la importancia de aclarar estos hechos y no distorsionar la verdad con fines políticos, especialmente en esta temporada electoral. Subrayó que es crucial evitar el uso de tragedias como la desaparición de los 43 normalistas con propósitos políticos y partidistas.
El jefe de Estado también enfatizó que su gobierno está comprometido en llevar a cabo una investigación exhaustiva y transparente para esclarecer lo sucedido con los estudiantes de Ayotzinapa. Esto se produce después de que el subsecretario de Derechos Humanos, Alejandro Encinas, revelara que Tomás Zerón de Lucio, exdirector de la Agencia de Investigación Criminal de la extinta Procuraduría General de la República (PGR), respondió un cuestionario de 100 preguntas ante la Comisión para la Verdad y Acceso a la Justicia del Caso Ayotzinapa (Covaj). En sus respuestas, Zerón de Lucio señaló que una junta de autoridades construyó lo que se conoce como “la verdad histórica” en relación con el caso.
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