El presidente Andrés Manuel López Obrador rechazó el informe reciente de la Agencia Antidrogas de Estados Unidos (DEA) que destaca la presencia de los cárteles mexicanos Sinaloa y Jalisco Nueva Generación en territorio estadounidense, calificándolo como un “refrito” de datos pasados.
Según López Obrador, esta presencia no es nueva y se gestó desde hace cinco años, remontándose a los tiempos de un “narcoestado” en México durante el gobierno de Felipe Calderón y su secretario de Seguridad Pública, Genaro García Luna.
El presidente destacó que México está aplicando una estrategia para reducir los homicidios relacionados con el narcotráfico y está cooperando con Estados Unidos en este ámbito, pero subrayó que el principal problema en Estados Unidos es la pandemia del consumo de fentanilo.
En relación con la migración, López Obrador informó sobre la consolidación de la coordinación con la consejera de Seguridad de la Casa Blanca para ordenar el flujo migratorio en la frontera norte.
El presidente destacó una disminución significativa en el flujo migratorio hacia Estados Unidos, mencionando que en diciembre de 2023 se registraron hasta 12 mil 498 migrantes diarios intentando ingresar, comparado con los actuales 5 mil 506, de los cuales mil 655 obtuvieron visa de trabajo.
López Obrador enfatizó la importancia de que Estados Unidos invierta en los países de origen para abordar las causas fundamentales de la migración y subrayó la necesidad de proteger a los migrantes y ordenar el flujo migratorio para evitar riesgos y fomentar el trámite legal de visas de trabajo en Estados Unidos.
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