La Encuesta Intercensal 2025 se cancela por recortes presupuestales.
El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) confirmó que la Encuesta Intercensal 2025 no se realizará debido a recortes presupuestales. Esta herramienta, crucial para la planificación de recursos y políticas públicas, había sido una constante desde 1995. La decisión genera inquietud en ámbitos académicos y sociales por la pérdida de datos actualizados y precisos sobre la población y vivienda del país.
A diferencia del censo, que se lleva a cabo cada década, la encuesta intercensal se basaba en muestras representativas que permitían identificar tendencias demográficas como crecimiento poblacional y despoblación en ciertas regiones. Con su desaparición, el reparto de recursos y decisiones clave se basarán únicamente en proyecciones, lo que podría comprometer la precisión en la asignación de fondos públicos.
Graciela Márquez, titular del INEGI, explicó que los recortes de 5 mil millones de pesos en el presupuesto del Instituto imposibilitaron la realización de esta medición, a pesar de ser considerada una prioridad estratégica. Según el INEGI, los resultados de la encuesta habrían sido especialmente relevantes tras la pandemia de COVID-19, que modificó drásticamente la dinámica demográfica y económica del país.
Esta medida ha provocado reacciones negativas en sectores académicos, que señalan el impacto en la calidad de las políticas públicas. Además, la desaparición del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (CONEVAL) agrava la situación, ya que sin datos confiables, será más difícil evaluar los resultados de programas sociales como becas y apoyos directos.
La cancelación de la Encuesta Intercensal evidencia las tensiones entre la austeridad presupuestaria y la necesidad de contar con datos confiables para la toma de decisiones. El INEGI continuará operando con recursos limitados, lo que podría afectar otros programas estratégicos en los próximos años.