Rogelio Ramírez de la O, secretario de Hacienda y Crédito Público, aseguró que el Gobierno ya analiza cómo utilizar los 12 mil millones de dólares que le corresponden por derechos especiales de giro (DEG), asignados por el Fondo Monetario Internacional al país, para pagar la deuda externa y destinar una parte al Presupuesto de Egresos de la Federación.
“Se está evaluado destinarlos (los 12 mil millones de dólares) al pago de la deuda que tiene las mayores tasas de interés, a la reducción del costo financiero, y una parte al presupuesto”, expuso durante la reunión plenaria de los diputados de Morena en San Lázaro.
El funcionario aseguró que la opción es viable si el Banco de México emite bonos de regulación pagando una tasa de interés más alta de la que se pagaría con la emisión de certificados de deuda, esto, explicó, “para adquirir divisas por parte de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público”.
Ramírez de la O también adelantó que el proyecto de Presupuesto de Egresos del 2022 se presentará a más tardar el 8 de septiembre. “Presentaremos el 8 de septiembre un paquete económico equilibrado entre ingreso y gasto, responsable y realista”, expuso.
El presidente Andrés Manuel López Obrador insistió el 24 de agosto que su Gobierno hará un pago adelantado a la deuda mexicana por el equivalente a 12 mil 117 millones de dólares, luego de la entrega de los DEG por parte del FMI.
Un día antes, el Banco de México anunció que esos fondos habían llegado al país. La asignación de los recursos es parte de una estrategia que acordó el FMI para repartir 650 mil millones de dólares entre sus miembros, en proporción a sus cuotas en el organismo, para inyectar liquidez y ayudar a fortalecer sus reservas internacionales. Los DEG son un activo de reserva internacional que creó el FMI en 1969 para complementar otros activos de reserva de los países miembros.
El Banco de México dijo ese día en un comunicado que los recursos forman parte de las reservas y que, de acuerdo con la ley, sólo pueden ser empleados para “coadyuvar a la estabilidad del poder adquisitivo de la moneda nacional”. Una de las operaciones permitidas consiste en que el Gobierno federal “pueda contar con moneda extranjera para cumplir con sus obligaciones en divisas”.
Con información de Sin Embargo