Diversos medios de comunicación dieron a conocer que hasta 50 personas del entorno del presidente Andrés Manuel López Obrador, entre ellos, su esposa, Beatriz Gutiérrez Müller, fueron espiados durante varios años.
“Es sin duda importante la exhibición pública de estas prácticas que confirman nuestras antiguas sospechas. No me sorprende. Me repugna, pero estamos acostumbrados. Gracias a todos los investigadores que emprendieron la revisión de esos expedientes de aquella empresa extranjera que fue contratada para entrometerse en casa.
“Autoridades mexicanas como la Fiscalía General de la República deben hacer las indagaciones correspondientes. En lo personal, deseo con toda el alma vivir en un Estado de Derecho y no acostumbrarnos a estas intimidaciones no solo del periodo indicado por los reportajes que circulan, sino de antes”, recalcó Gutiérrez Müller en sus cuentas de redes sociales.
El espionaje que sufrieron ella y el hoy presidente López Obrador tuvo varias facetas, tanto a distancia, como otras más invasivas.
Señaló directamente a los gobiernos pasados de instrumentar el acoso a ella, a López Obrador y a todas las personas en su entorno.
“El gobierno quebrantó sistemáticamente nuestros derechos individuales como el de la privacidad. Por fortuna, lo ha declarado el actual presidente Andrés Manuel López Obrador, ya no se realizan violaciones a la ley. Quienes nos han espiado, miren la paradoja, no reciben el mismo trato”, sentenció.