La presidenta Claudia Sheinbaum ha declarado que no existe una crisis migratoria en México, destacando una disminución significativa en el número de migrantes que cruzan el país hacia la frontera norte. Según sus declaraciones, el número de personas que llegaban a la frontera norte en diciembre de 2023 era de aproximadamente 13,000, mientras que actualmente esa cifra ha bajado a alrededor de 419 migrantes diarios .
Sheinbaum atribuye esta reducción a diversas acciones implementadas por su gobierno, como la coordinación con países de origen de los migrantes y la implementación de la aplicación CBP One para solicitudes de asilo en la frontera sur de México. Sin embargo, es importante señalar que la administración del presidente Donald Trump ha revertido algunas de estas medidas, como la eliminación de la aplicación CBP One y la suspensión del derecho de asilo en Estados Unidos, lo que ha afectado los flujos migratorios .
A pesar de la disminución en los cruces hacia la frontera norte, México enfrenta desafíos en la gestión de la migración, incluyendo un aumento en la detección de migrantes irregulares y la necesidad de fortalecer el Instituto Nacional de Migración (INM). La presidenta ha anunciado reformas al INM para transformarlo en un organismo que apoye la movilidad humana, en lugar de centrarse únicamente en el control migratorio.
En resumen, aunque el gobierno de Sheinbaum reporta una disminución en los flujos migratorios hacia la frontera norte, persisten desafíos en la gestión de la migración y en la implementación de políticas que respeten los derechos humanos de los migrantes.