En Cambio Diario informa que Coca-Cola México: un compromiso voluntario con el agua que trasciende la industria, luego de que la compañía anunciara la devolución de más de 4 millones de metros cúbicos de agua a la naturaleza. Este esfuerzo se enmarca en un acuerdo con el gobierno de Claudia Sheinbaum Pardo y demuestra una apuesta por la sustentabilidad que va más allá de los intereses empresariales.
Una decisión voluntaria con impacto nacional
La Industria Mexicana de Coca-Cola (IMCC) sorprendió al país al poner a disposición del Estado volúmenes de agua no utilizados en sus concesiones. Según Patricio Caso, director de Asuntos Públicos, Comunicación y Sustentabilidad, se trató de un acto de “absoluta buena fe”, sin beneficio económico para la empresa, pero con un alto impacto social y ambiental.
Acciones que refuerzan la sustentabilidad
Devolver el agua a la naturaleza
El compromiso de la IMCC es devolver a la naturaleza el 100% del agua utilizada en sus procesos productivos. La devolución de los más de 4 millones de metros cúbicos representa un paso firme hacia ese objetivo.
Compromiso con las comunidades
La empresa ha fijado como meta brindar acceso a agua potable a un millón de mexicanos para 2030. Este plan se apoya en proyectos de captación, reforestación y la construcción de humedales comunitarios.
Coca-Cola México: un compromiso voluntario con el agua que trasciende la industria
La confirmación de que Coca-Cola México: un compromiso voluntario con el agua que trasciende la industria refuerza la visión de la compañía como un actor responsable en la gestión de los recursos naturales. En un país donde el agua es un tema de debate político y social, esta acción busca marcar un precedente en la colaboración entre sector privado y gobierno.
Más allá del agua: un giro en la estrategia empresarial
Salud pública en el centro
La IMCC respaldó la prohibición de venta de comida chatarra en escuelas, ofreciendo productos más saludables y alineados con las políticas de salud.
Responsabilidad con la niñez
La compañía mantiene una política global que prohíbe la publicidad dirigida a menores de 14 años, un esfuerzo por garantizar un entorno más seguro y consciente en el consumo.
Un compromiso que trasciende la industria
Este esfuerzo voluntario no sólo representa un beneficio ambiental, sino que fortalece la imagen de Coca-Cola como una empresa que entiende la urgencia de cuidar el recurso más valioso del país. Su papel en la gestión del agua demuestra que la responsabilidad social corporativa puede convertirse en un eje estratégico de desarrollo sostenible.
El caso de la IMCC refleja cómo la iniciativa privada puede sumarse a los esfuerzos del Estado para garantizar un futuro sustentable. En tiempos de escasez y debates sobre la gestión del agua, Coca-Cola México se posiciona como un referente que apuesta por trascender los límites de la industria con acciones voluntarias que benefician al país.