A una hora de haber comenzado la marcha por el cuarto aniversario de la Cuarta Transformación, el presidente Andrés Manuel López Obrador avanzó con paso lento debido a la dificultad para poder caminar ante la gran concentración de personas o asistentes. Tras una hora de caminata se encuentra a la altura de la plaza comercial Reforma 222.
Alrededor del mandatario durante todo el trayecto cientos de personas han intentado acercarse al tabasqueño para tomarle una foto, para verlo simplemente, algunos para entregarle algún documento, y otros simplemente para corear “no estás solo” o “es un honor estar con Obrador”, entre otras frases.
Los esfuerzos por acercarse al presidente por lo general no rinden frutos, ya que ante la gran multitud el escenario se ha convertido en empujones constantes, gritos con los que llaman al orden, ante otros que piden de manera insistente avanzar.
Aunque al jefe del ejecutivo federal lo rodean a una corta distancia posibles integrantes del Ejército vestidos de civil y de su ayudantía, la misma población en varios de los tramos se ha encargado de abrirle paso y tratar sin éxito de hacerle vallas para que avance. Los empujones son tal que la mayoría de los funcionarios que se acercaron en un inicio para acompañarlo gobernadores y varios legisladores han preferido hacerse a un lado y avanzar por otras vías, también se han visto a cientos de adultos mayores y menores que han tratado de resguardarse.