En Cambio Diario informa que el Departamento del Tesoro de Estados Unidos ha tomado medidas contundentes contra una red de fraude y huachicol vinculada al Cártel de Jalisco Nueva Generación (CJNG) en Puerto Vallarta. La acción, ejecutada por la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC), golpea directamente las operaciones económicas de este grupo criminal que aprovechaba el turismo y la venta de tiempos compartidos para financiar sus actividades ilícitas.
Golpe financiero contra el CJNG en Puerto Vallarta
El anuncio oficial, emitido el 13 de agosto, detalla que cuatro personas y trece empresas mexicanas han sido sancionadas por su papel en fraudes y actividades ilegales. Estas compañías, dedicadas a inmobiliaria, turismo, servicios automotrices y contabilidad, operaban en la región como fachada para mover recursos del CJNG.
Entre los sancionados destaca Michael Ibarra Díaz Jr., un empresario turístico con más de dos décadas en el negocio de tiempos compartidos, señalado por facilitar operaciones fraudulentas en nombre del cártel.
Cómo operaba la red de fraude y huachicol
EU ‘castiga’ a defraudadores y huachicoleros de Puerto Vallarta
Según el Departamento del Tesoro, desde 2012 el CJNG ha controlado complejas estafas de tiempo compartido en Puerto Vallarta y zonas aledañas. El objetivo principal eran turistas estadounidenses, sobre todo personas mayores, quienes podían perder sus ahorros de toda la vida en operaciones que parecían legítimas.
Los fraudes incluían reventas falsas, alquileres ficticios y supuestas inversiones en propiedades vacacionales. Las víctimas eran convencidas de pagar “cuotas” e “impuestos” anticipados con la promesa de recibir una ganancia posterior, que nunca llegaba.
Puerto Vallarta: turismo y criminalidad entrelazados
El comunicado de la OFAC advierte que, aunque Puerto Vallarta es un destino turístico internacional, también se ha convertido en un bastión estratégico del CJNG. El control de negocios legales mezclados con ilícitos permitió al grupo criminal diversificar sus ingresos y reducir riesgos ante operativos policiales.
{El turismo en Puerto Vallarta} ha sido usado como escudo, con empresas que parecen legítimas pero que funcionan como centros de lavado de dinero y operaciones fraudulentas.
Sanciones y consecuencias internacionales
La OFAC ha bloqueado todos los bienes y activos que las personas y empresas sancionadas tengan en Estados Unidos o bajo control de ciudadanos estadounidenses. Además, ha prohibido cualquier tipo de transacción con ellas, salvo que exista una autorización especial.
El gobierno estadounidense también lanzó una advertencia clara: instituciones extranjeras que faciliten estas operaciones podrían enfrentar sanciones secundarias. Esto coloca bajo riesgo a bancos y empresas que mantengan vínculos con los implicados.
Declaraciones oficiales: un mensaje directo al CJNG
Scott Bessent, secretario del Tesoro, afirmó que seguirán cerrando las fuentes de ingresos del CJNG, especialmente aquellas basadas en el engaño a adultos mayores. La prioridad, dijo, es detener el flujo de dinero ilícito que financia el tráfico de drogas, incluido el fentanilo.
Impacto en las víctimas y en el sector turístico
Las autoridades señalan que el daño causado por estas estafas no es solo financiero, sino también emocional. Las víctimas, en su mayoría ciudadanos extranjeros, enfrentan años de recuperación económica y pérdida de confianza en el destino turístico.
Esto podría impactar la percepción internacional de Puerto Vallarta y, a largo plazo, afectar la llegada de visitantes. Sin embargo, expertos consideran que la acción del Tesoro es un paso importante para depurar la actividad empresarial en la zona.
Resumen de las claves del caso
- 4 personas y 13 empresas mexicanas sancionadas.
- Vínculos directos con el Cártel de Jalisco Nueva Generación.
- Operaciones de fraude con tiempos compartidos desde 2012.
- Uso de empresas turísticas como fachadas para lavado de dinero.
- Bienes bloqueados y transacciones prohibidas en Estados Unidos.