Cientos de empleados que trabajan en la empresa de Twitter, renunciarón, la razón al no estar de acuerdo con la cultura que el hombre más rico del mundo, Elon Musk, intenta imponer.
La nueva purga se produce apenas días después de que Musk despidió a decenas de empleados en todo el mundo. En este contexto, el nuevo dueño de la red social fijó una fecha límite este jueves para que todos los empleados respondan ‘Sí’ en un formulario de Google si quieren quedarse en lo que él llama ‘Twitter 2.0’.
En caso contrario, este jueves sería su último día de trabajo y recibirían una indemnización por despido. Al llegar la fecha límite, cientos de empleados comenzaron a publicar mensajes de despedida y emojis de saludo en el Slack de Twitter. Su respuesta ante el ultimátum fue un no.
‘Mi reloj termina con Twitter 1.0. No deseo ser parte de Twitter 2.0’, dijo uno de los empleados. ‘No voy a presionar el botón’.
Mientras, otro exmiembro de la empresa incluso compartió un video. En él realizan una cuenta regresiva que marcaría la fecha límite, es decir, el momento de su despido.