Este 1 de septiembre las autoridades de Japón anunciaron que detectaron partículas de acero inoxidables en las vacunas de Moderna contra la COVID-19.
Tras una investigación de Moderna y el distribuidor local Takeda Pharmaceutical Co se hallaron los contaminantes, informó el Ministerio de Salud.
Takeda Pharmaceutical comunicó que el acero inoxidable se usa habitualmente en válvulas cardíacas reemplazadas de articulaciones, suturas y grapas metálicas.
Aseguraron que no se espera que la inyección de las partículas identificadas en los lotes en Japón resulte en un mayor riesgo médico.
Autoridades sanitarias de Japón suspendieron la vacunación en un centro de la ciudad de Okinawa luego de localizar impurezas en la vacuna Moderna.
La noticia ocurrió luego de Japón desechó 1.63 millones de dosis por seguridad al detectar algunas dosis aparentemente contaminados. Las dosis procedían de tres números de lote identificados: 3004667, 3004734 y 3004956; se habían distribuido a 863 centros de vacunación en todo Japón.
Las anomalías se detectaron en un vial y dos dosis que se iban a aplicar en un centro de vacunación de la localidad de Naha, lo que llevó a la prefectura de Okinawa a anunciar la suspensión de la inmunización de esas instalaciones como medida de cautela.