Corea del Norte empieza a abrirse al turismo extranjero cinco años después de haber cerrado sus fronteras para protegerse de la del COVID-19
Un pequeño grupo de turistas extranjeros ha visitado Corea del Norte, en la última semana, siendo estos los primeros viajeros en entrar al país en cinco años.
Esto podría indicar que Corea del Norte busca reactivar su limitada industria turística, restablecer vínculos económicos con socios clave como China y Rusia y aliviar su aislamiento autoimpuesto.
Fue el jueves pasado que dos agencias de viajes occidentales, Koryo Tours y Young Pioneer Tours cruzaron al país.
Su itinerario de cinco días ofrece visitas a fábricas, escuelas de idiomas extranjeros y de taekwondo, zonas de recreo junto al mar y un banco donde los visitantes podrán abrir una cuenta bancaria norcoreana. El recorrido cuesta 645 euros por persona y pasa cuatro noches en Rason en el noreste de Corea del Norte.