Sigue firme la corrida por el 30 aniversario de la Plaza de Toros
Sigue firme la corrida por el 30 aniversario de la Plaza de Toros – Utilizarían huecos legales, como el hecho de que las leyes no son retroactivas.
La Ley de Protección y Bienestar Animal publicada ayer en el Periódico Oficial del Estado es endeble e imperfecta, como le llaman los juristas, porque por un lado no impone sanciones y por otro no cumplió lo que marca la Constitución respecto a las consultas que previamente se debieron hacer a las comunidades que se pudieron haber visto afectadas, afirmó Jorge Ávila, matador de toros.
Además, independientemente de los recursos que se pudieran interponer contra esa ley, dijo que los integrantes de la XVI Legislatura ya tienen prevista una reforma porque están conscientes de que es una ley inacabada.
Tenemos acordada una reunión con la actual legislatura, cuyos integrantes saben también que la ley fue aprobada al vapor porque ni siquiera pasó por comisiones en la Legislatura, añadió.
En esas condiciones, la ley no afecta a la corrida del 20 de diciembre, que ha generado gran expectación y en la que participarán Pablo Hermoso de Mendoza y David Silveti, para celebrar el 30 aniversario de la Plaza de Toros. En primer lugar, la ley fue publicada luego del anuncio de la corrida y hay que recordar que las leyes nunca son retroactivas. Es a partir de hoy que ya están prohibidas, pero no las que se programaron antes, aseveró.
Al abundar sobre la Ley de Protección y Bienestar Animal, dijo que como matador de toros está de acuerdo con el dictamen original de la ley, que considera el bienestar animal en general, no las prohibiciones que se promulgaron en julio.
Por último, insistió en que a diferencia de las reses mansas, que son las destinadas para consumo humano, los toros bravos tienen una vida y un final diferente.
Las reses mansas viven alrededor de un año y dos meses encerrados en un corral, donde se les engorda artificialmente y se les lleva al matadero. El toro bravo, en cambio, vive un promedio de cuatro a cinco años, totalmente en libertad y armonía en las ganaderías donde es criado y muere en una forma digna dada su condición esencial de bravura, indicó.
Si se prohíben las corridas, con el toro bravo pasará lo mismo que con los animales de los circos y eso lo tienen claro los diputados y por eso esperamos una pronta reforma a la ley publicada ayer, apuntó.