Concluirá temporada de sargazo en Q. Roo, asegura Carlos Joaquín
Cancún.- Luego de que el Comité Técnico Asesor del sargazo en Quintana Roo, diera a conocer que tiene registro de una franja de 50 kilómetros del alga entre Solidaridad y Tulum, el gobernador del estado, Carlos Joaquín público en sus redes que de seguir así, pronto concluirá la temporada de sargazo 2020.
Y es que los efectos del sargazo fueron analizados en el panel de expertos denominado “Arribazón de sargazo en el Caribe Mexicano”, donde participaron los investigadores Brigitta Ine van Tussenbroek, del Instituto de Ciencias del Mar y Limnología de la UNAM sede Puerto Morelos; Jaime González Cano, del Instituto Nacional de Pesca y Alberto Pereira Corona, de la Universidad de Quintana Roo.
En su ponencia el investigador González Cano destacó que los años con mayor volumen de recale del alga han sido 2018 y 2019 y si bien es un problema en toda la costa, hay sitios donde llega más cantidad.
Estimó además que hay 35 millones de toneladas de sargazo flotando en el área del Mar Caribe y el océano Atlántico central.
Respecto al al arribo a las costas de la entidad este año dijo que: “los primeros meses teníamos un comportamiento parecido al 2015 (cuando llegaron 80 millones de toneladas), pero este ha venido decayendo y lo que nosotros estimamos es que estaríamos llegando en 2020 a cerca de 51 millones de toneladas”.
En tal sentido, Brigitta Ine van Tussenbroek mencionó que fue a partir de 2011 cuando se tuvo un incremento en la llegada del alga, procedente de la zona entre África y Brasil. Los “responsables” de este incremento son las especies holopelágicas, que pasan todo su ciclo de vida flotando en el mar y no se pegan al fondo.
Distinguió entre dos tipos de arribazones: la marea dorada, que son masas flotantes de sargazo en mar abierto, “estas traen vida, son refugio de tortugas e incluso tienen fauna endémica, si se quedaran en el océano el problema no sería grave, el problema es que llegan a las costas”.
Está también “la marea marrón de sargazo, cuando grandes cantidades llegan a las costas”. La primera “marea marrón” se registró en 2015 y el fenómeno empezó a monitorearse en 2016. Coincidió con sus colegas en que este año no llegó tanta talofita como se esperaba. “El sargazo per se no es malo ni dañino, lo que es dañino para el ambiente son las enormes masas algales en descomposición”, dijo.